Aspecto actual tras su restauración |
Aspecto antes de la restauración |
La ciudad modernista de La Unión alberga algunas joyas modernistas que han resistido el paso del tiempo y el afán demoledor de las últimas décadas.
Una de ellas es la llamada "Casa Cortes", ubicada a la altura del número 82 de la calle Mayor, la arteria más importante de la localidad.
Proyectada por Víctor Beltrí (aunque no se conserva en el Archivo Municipal el proyecto original), fue construida hacia 1906 para D. Pascual Conesa Martínez.
Cuando éste trasladó su domicilio a Cartagena, le alquiló la casa al abogado y Secretario Municipal D. José Cortés Varela, de quien toma el nombre por el que se la conoce en la actualidad.
Comparación de los "piñones" de la Casa Cortés de La Unión y de la Casa de los Catalanes, en Cartagena |
Detalle de los azulejos, que a pesar de tener más un siglo de antigüedad, todavía se conservan de forma bastante aceptable |
Su diseño es muy similar a la “Casa de los Catalanes” de Cartagena. La mayor diferencia entre los dos edificios reside en que el primero tiene más profusión de “piñones” en la decoración de su fachada, y además emplea en ella bellos azulejos que enmarcan los guardapolvos. Dichos “piñones”, que poseen una bonita decoración floral, más elaborada que la de la "Casa de los Catalanes", están unidos entre si en su parte superior por una artística barandilla de hierro forjado. Este tipo de decoración de guardapolvos con hojas enroscadas en las esquinas y cartelas en el centro adquirió con Beltrí un cierto tono local, a pesar de su indudable raíz catalana.
En su primera planta, sede del estudio del pintor local Francisco Hernández Cop, aún se conservan algunas de las pinturas y las molduras vegetales originales que adornaban los techos.
Nada queda del original en la planta baja, que fue transformada hace años de forma irreversible, probablemente para adaptarla a sede bancaria. Es muy posible que desde un primer momento, y dada su localización, fuese un comercio, tal vez una carnicería (ese es el significado de la palabra "tercena"). Del interior se conservan parte de los pavimentos originales, y la escalera del edificio.
Mi amigo Jose Antonio Rodriguez (jarm), Vicepresidente de la Comisión Beltrí 2012, me informó de que afortunadamente, a finales de 2016 se acometió su restauración de forma que se eliminaron óxidos y se repararon piñones, embocaduras y barandillas, igualando las fachadas de las dos planta de forma que imitaran sillares. La inauguración tuvo lugar durante el mes de diciembre.
La empresa que hizo posible que el edificio vuelva a relucir en todo su esplendor fue "Restauralia".