En la localidad de Mula las
muestras de modernismo son bastante escasas. No obstante en las afueras de la
localidad se puede observar una vivienda aislada denomina por los muleños la Casa
Azul, o Torre Azul, llamada así por el color del mortero que recubre sus
paramentos exteriores.
Sabemos que construida en 1905, según una lápida que figura en su fachada, aunque debió de sufrir alguna reforma modernista en la segunda década del pasado siglo, para darle un aire más acorde con las nuevas tendencias.
Su tipología es la clásica de las
viviendas del campo murciano: una casa exenta de planta, más o menos, cuadrada,
en la que una torreta central denominada linterna servía, por un lado, para dar
luz natural a un patio interior que hacía las veces de distribuidor de las
diversas habitaciones y dependencias, y además se utilizaba como de lugar de
vigía de la finca que rodeaba a la vivienda.
Lo más interesante de este
edificio es el adorno bajo el alero, así como las embocaduras que adornan todos
los huecos de las dos plantas, realizados en piedra artificial en el mejor estilo modernista cercano
a la sezession, y que no se parecen a ninguna otra en la Región de Murcia.
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Aspecto original de la torreta antes del terremoto
(Fotografía: Hervás y Segovia Pág. 81) |
Mirando una fotografía antigua pude observar que dichos adornos modernistas
también existían en los huecos de la linterna, por lo que saqué como conclusión
que la torreta actual es moderna, como puede uno deducir si se fija un poco en
ella.
Gracias a Juan Guillén y Antonio
Gabarrón del Archivo Municipal de Mula, me pude poner en contacto
con los propietarios actuales de la vivienda que me explicaron que la linterna
original había sido muy dañada durante el terremoto que afectó a la zona el 2
de febrero de 1999, y que tuvo que ser demolida y reemplazada por la que se
puede ver hoy en día. También me comentaron qué lo más interesante del interior
de la vivienda era la escalera, en cuyo arranque del pasamos había una figura en
forma de dragón.
Así mismo los actuales dueños me pusieron sobre la pista del que debió de ser el propietario original, D. Francisco López Lamarca [Mula, ? - Mula, 1929].
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Francisco López Lamarca
(Fernández, Pág. 336) |
Al parecer este señor descendía de una familia de origen italiano, que tenía un negocio de carpintería especializado en la fabricación de ataúdes y trabajaba como empleado en la tienda de textiles propiedad de D. Emeterio Cuadrado. Con la tienda a pleno rendimiento se produjo el fallecimiento del Sr. Cuadrado, haciéndose cargo de la tienda Francisco quien compró el negocio a la familia.
Su buen hacer hizo que el comercio prosperara vendiendo telas que él mismo traía de Barcelona, de forma que gracias a su éxito consiguió adquirir una holgada posición económica.
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Juan Huéscar
(Fernández, Pág. 340) |
El autor de la reforma fue con toda probabilidad el Maestro de Obras local Juan Huéscar Egea [Mula, 1882 - Mula, ?], autor de numerosas obras de la localidad, entre las que destaca la orientalista "La Sultana", realizada junto con su padre, el también Maestro de Obras Juan María Huéscar Pérez.
Juan Huéscar llegó a fabricar sus propias molduras de piedra artificial y baldosas hidráulicas en un taller que estableció junto a su hermano José en los bajos de la Casa de los Blaya, en la Calle del Grifo.
La Casa
Azul tiene protección de Grado 2 Estructural.
Desde
aquí quiero agradecer públicamente al personal del Archivo Municipal de Mula y
a los actuales propietarios, D. Manuel Rodríguez López y su esposa, por toda la
información aportada.
REFERENCIAS
- FERNÁNDEZ DEL TORO, J. Torre Azul (Mula, 1905): Un ejemplo de quinta modernista. Págs. 335-342. XXV Jornadas del Patrimonio Cultural de la Región de Murcia. 2019.
- HERVÁS AVILÉS, J. M. Y SEGOVIA MONTOYA, A. Arquitectura y color. Colegio Oficial de Arquitectos de Valencia. 1983.
