viernes, 14 de junio de 2024

165.- EDIFICIO CALLE DON ROQUE - C/ Don Roque, 13. Cartagena

Comparativa de la fachada antes y después de su "rehabilitación"
Uno de los edificios más bonitos que hubo en Cartagena estaba situado en la calle Don Roque. Y digo estaba, porque tras la reconstrucción de la fachada (único elemento que se conservaba del original) podemos darlo prácticamente por desaparecido.

Esta "rehabilitación", ha supuesto la pérdida de la preciosa tribuna original de madera que formaba un gran arco semicircular en cuyo remate se adivinaban las iniciales “F” y “S” del primer propietario, así como la preciosa cornisa ondulada que remataba el edificio. 

Comparativa de la cornisa original y la actual

Lo único que se han conservado de la fachada original son la bonita rejería, y una gran parte de la segunda planta, donde lo más original son los vanos de las dos puertas de acceso al balcón que se enmarcan en arcos de herradura, que recuerdan al arco de la portada del mihrab del oratorio de la Aljafería de Zaragoza*. 

Imagen antigua del conjunto de edificios que hubo en la Calle Don Roque
(Fuente: Archivo particular José Antonio Rodríguez)

Este estrecho edificio modernista unifamiliar de dos plantas, formaba parte de un conjunto de edificios modernistas muy interesantes que fueron completamente derribados, excepto la mencionada fachada que se mantuvo erguida durante décadas, amenazando con venirse abajo en cualquier momento, hasta que se acometió la mencionada "rehabilitación".

Aspecto original del edificio en la década de los sesenta del siglo pasado
(Fuente: Archivo particular José Antonio Rodríguez)
Aspecto a principios del siglo XIX
El edificio que recordaba en su estilo al modernismo belga, en la curvatura de las rejerías y la decoración de latiguillos, parece que fue construido probablemente hacía 1906, y aunque su autoría se la atribuyó Pérez Rojas, con ciertas dudas, al arquitecto Tomas Rico, no está documentada su participación en este edificio. 

Nosotros albergamos ciertas dudas sobre su autoría, ya que Rico nunca prodigó el estilo neoárabe en sus obras, al contrario que otros profesionales de esta época como Pedro Cerdán, o Víctor Beltrí.

Otra joyita que ha perdido Cartagena. Sin palabras.

* Información proporcionada por María José Lario