Víctor Beltrí en 1894, justo antes de instalarse en Cartagena. (Fotógrafo desconocido: Colección Guillermo Cegarra Beltrí) |
El 4
de febrero del 2015 se cumplieron 80 años del fallecimiento del más importante
arquitecto modernista que trabajó en la provincia de Murcia, y desde aquí también nos sumarnos al homenaje que se le rindió tanto en la prensa escrita como en diversos medios audivisuales.
Víctor Beltrí y
Roqueta, nació en el seno de una familia humilde y con pocos recursos
económicos, siendo su padre el escultor, dibujante y músico José María Beltrí Belilla
(1829-1898), y su madre la maestra Mª Carmen Roquetas Estampres (1829-1887).
El ambiente intelectual de la familia ejerció una influencia decisiva en los
primeros años del futuro arquitecto. En su juventud formó parte de un grupo de
jóvenes artistas tortosinos aspirantes a pintores o escultores, entre los que
destacaba el famoso escultor Domingo Agustín Querol y Subirats (1860-1909),
siendo la pintura la primera inclinación de Beltrí.
En septiembre
de 1880 se traslada a Barcelona para matricularse de forma simultánea, durante dos
cursos, en la Escuela de Arquitectura, la Facultad de Ciencias Exactas, Físicas
y Naturales y en la Escuela Oficial de Bellas Artes. A partir del curso 82-83
sólo se matricula en la Escuela de Arquitectura. Aquí recibe las enseñanzas de
un grupo de profesores encabezados por su Director Elías Rogent y Amat
(1821-1897), y entre los que destacaban Augusto Font y Carreras (1845-1924),
Lluis Domènech i Montaner (1849-1923) y José Vilaseca y Casanovas (1848-1910). En dicha Escuela recibió una formación ecléctica, en la que se concedía gran importancia,
junto a la técnica, a la preparación artística.
Para poder
costearse los estudios tuvo que trabajar en el estudio del propio Augusto Font,
en donde llega a alcanzar el puesto de delineante jefe. Durante estos años en
Barcelona al parecer trabajó con Antonio Gaudí y Cornet (1852-1926), y aunque
no está claro en qué consistió su colaboración, se piensa que debió de hacerlo
en la Casa Vicens, en donde quedaría muy influido por el orientalismo y el
empleo masivo de la cerámica. Buen alumno, finalizó la carrera en diciembre de
1886.
Sello del arquitecto, hallado por Juan Ignacio Ferrández en un documento del Archivo Municipal de Cartagena |
A la
terminación de sus estudios se traslada a Tortosa para ejercer como Arquitecto
Municipal entre 1887 y 1890, año en que, por avatares políticos, se ve obligado
a presentar la dimisión junto con otros profesionales del consistorio. Lo más
destacado de su paso por esta ciudad va a ser la ordenación de los Ensanches,
la reforma del Mercado de Abastos (1886-87), la Audiencia de lo Criminal y
Juzgados (1888) y el Palacio Montagut (1889), así como numerosas
intervenciones en obras públicas (puentes, carreteras...) y urbanísticas (calles,
plazas, alcantarillado...).
En 1890 se
traslada a Gandía (Valencia) para ocupar la plaza de Arquitecto Municipal. El Ayuntamiento
le encarga una serie de trabajos importantes, tales como el diseño del proyecto
del Ensanche del Grao (1891-92), la Iglesia del Grao (1891), el Mercado (1892),
el Matadero Municipal (1893) y las Escuelas públicas y Oficinas de Correos y
Telégrafos (1893). Ninguna de estas obras fue construida a pesar de ser
aprobadas, probablemente por ser proyectos demasiado avanzados para los
regidores de la villa. De su paso por esta ciudad, hay que resaltar además, su
labor pedagógica y social, ya que allí fundó unas clases gratuitas de dibujo
para obreros.
Cansado de esta
situación, a mediados de 1893 presentó la dimisión, tras ganar una plaza como
Arquitecto Inspector Técnico de la Hacienda de la provincia de Murcia,
instalándose en su capital. En 1895 se traslada a vivir a Cartagena que en
aquellos momentos era una ciudad en plena reconstrucción tras la sublevación
cantonal, con una economía floreciente como consecuencia del auge experimentado
por la industria minera.
A principios de
1897 Beltrí abandona su puesto de Arquitecto Provincial de Hacienda para dedicarse
exclusivamente al ejercicio libre de la profesión, realizando importantes obras
para los acaudalados propietarios mineros, ejecutando, durante la primera
veintena del siglo XX, lo mejor de su producción modernista con obras en Cartagena y sus pedanías tan destacadas, como:
- Ayuntamiento de Cartagena (dirección de obras)
- “Café-Restaurante España” (desaparecido)
- Casa Beltrí (desaparecida)
- Casa Cervantes
- Casa de Misericordia
- Casa del Niño
- Casa Dorda
- Casa Dorda Bofarull
- Casa Fernando Delmas (atribuida)
- Casa Llagostera
- Casa Maestre (dirección de obras)
- Casa Neoárabe (atribuida)
- Casa Zapata
- Casas de los Catalanes
- Casino de Cartagena (reforma)
- Casino de San Antonio Abad
- Casino del Llano del Beal
- Círculo Militar (reforma) (desaparecido)
- Chalet Oria (desaparecido)
- Cochera para Miguel Zapata (desaparecida)
- Edificio Alessón
- Edificio Antonio Paredes
- Edificio Berruezo Céspedes
- Edificio Carmen Lizana
- Edificio Juan Conesa
- Edificio Torres (atribuido)
- “Gran Hotel”
- Fundición Frigard (ampliación y reforma)
- Huerto de las Bolas (reforma) (atribuida)
- Oficinas de la Sociedad de Seguros “El Día”
- Sede social de la Sociedad Cooperativa "La Conciliación" (no realizada)
- Pabellón del “Círculo Militar” (desaparecido)
- Palacete Versalles o Villa Calamarí (atribuido)
- Palacio Aguirre
- Palacio del General Escaño (reforma)
- Panteón Aguirre
- Panteón Celestino Martínez (atribuido)
- Panteón García Conesa (atribuido)
- Panteón Hinojal (atribuido)
- Panteón Madrid Solano (atribuido)
- Patronato del Sagrado Corazón
- Real Club de Regatas (desaparecido)
- Torre Catá (atribuida) (desaparecida)
- Villa Carmen o "El Cortijo" (atribuida) (desaparecida)
- Villa Elisa
- Villa Lolita
- Villa Victoria u Hotelito de Los Barreros (atribuida) (desaparecida)
Entre 1924 y
1929, ejerció como Arquitecto Municipal Auxiliar de Cartagena. Durante ésta época,
en que ostentaba la Alcaldía Alfonso Torres, se ejecutan numerosísimas obras
públicas y de ornato, en las que a menudo interviene Beltrí, tanto individualmente
como en colaboración con el Arquitecto Municipal titular Lorenzo Ros, en las que incorpora el regionalismo a sus diseños (Casa de Pedro Marín), influenciado por la Exposición Iberoamericana de Sevilla.
Fotografía oficial de V Congreso de Arquitectos celebrado en Valencia en 1909. Se puede observar a Beltrí en el centro mirando hacia su izquierda. |
Entre 1929 y
1932, y tras su cese como Arquitecto Municipal en Cartagena, realizó más de cien
obras en la ciudad de Murcia y en sus pedanías, entre las que destacan algunos
grandes edificios como el Casino de La Ñora (1931), así como alguna obra
importante en los Alcázares (Casa del Inglés), Lorca (Casa Cachá), aproximándose en su última época al art déco en Cartagena (Club de Tenis de Cartagena, Chalet para Carmen Beltrí), o en Los Urrutias (Hotelito Azul), e incluso al racionalismo.
Además de en La Unión (Antiguo Mercado Público Municipal (proyecto), Casa Cortés, Panteón Pedro y Manuel Salmerón) y Portmán (Casa del Tío Lobo, Círculo “El Progreso”..); en Mazarrón (Panteón Francisco Povo, Panteón Martínez Oliva), y la mencionada Lorca (Huerto Ruano (reforma), Panteón Millán Sastre), se piensa que tal vez pudo trabajar en
otras localidades de la provincia tales como: Totana (Huerto de la Torreta); Bullas (Casa de los Melgares, Palacete de Fuente de la Higuera); Fortuna (Casino del Balneario, Hotel Balneario, Casa Palazón); Lorquí (Casa Martínez Lozano); Torre Pacheco (Casa Manzanares); Totana (Huerto de la Torreta); o San Javier (Chalet del Conde de Campillos), todas ellas sin documentar.
También tenemos constancia de su actividad profesional fuera de la región, en
lugares como Melilla (dirección de obras de la remodelación de la Plaza de España) y posiblemente Palma
de Mallorca (Asilo de Ancianos), además de las ya mencionadas Tortosa y
Gandía, en donde destaca el modernista Palacete París.
Palacete París la mejor y más importante obra modernista existente en Gandía. @ Guillermo Cegarra Beltrí |
Gracias a tu libro de Murcia, a la Comisión Beltrí y a muchos particulares de la Región se ha podido recuperar la figura de un arquitecto prolífico, de obra variada y de calidad y que era también un gran desconocido.
ResponderEliminarMuchas gracias por tus comentarios. También tu labor incansable ha despertado la conciencia de muchos particulares y organismos oficiales que han empezado, por fin a tomar interés en la conservación y protección del patrimonio modernista.
ResponderEliminarMagnífica síntesis de una biografía tan intensa desde el punto de vista profesional. Nuevamente mi gratitud
ResponderEliminarMuchas gracias Juan Carlos, con seguidores como tu da gusto.
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